Los distintos dispositivos de ayuntamientos y entidades sin ánimo de lucro que constituyen la Red Regional de Atención a Transeúntes y Sin Techo atendieron el año pasado casi 10.000 casos de personas en situación de marginalidad y exclusión social.

El consejero de Salud y Bienestar Social, Fernando Lamata, que visitó este viernes el Centro de Atención Integral a Personas sin Hogar de Albacete, que gestiona el Ayuntamiento albaceteño y en el que colabora su departamento, destacó la solidez de esta red de recursos que dispone Castilla-La Mancha, una de las más completas de España para asegurar el cuidado de estas personas, así como para intentar la integración e inserción social y laboral de aquellos cuya situación hace todavía posible su recuperación.

El Gobierno de Castilla-La Mancha destina este año 17,8 millones de euros a proyectos de integración social con ayuntamientos y entidades sin ánimo de lucro en los que se acoge estos recursos y dispositivos, un 6,3% más que en 2008.

Según el consejero, el Gobierno regional, y en especial el presidente Barreda, tiene la voluntad de trabajar en colaboración con ayuntamientos y entidades sin ánimo de lucro de la región para apoyar a aquellas personas que menos tienen y erradicar las situaciones de pobreza y exclusión social en Castilla-La Mancha.

La Red Regional de Atención a Transeúntes está formada por 29 centros, que aglutinan 236 plazas, y que se encuentran divididos dependiendo del tipo de atención que prestan a los transeúntes.

Así, en un primer estadio se encuentran los centros de baja exigencia, de los cuales hay 18 en la región, en los que se presta una atención asistencial a las personas que lo necesitan, ofreciéndoles comida, cama, ropa y aseo, y acometiendo la primera aproximación para comprobar las posibilidades de inserción de las personas que recurren a estos dispositivos.

En un segundo nivel se encuentran los centros de atención integral, de los que existen 6 en la región, incluido el de Albacete, en los cuales se comienza la adquisición de hábitos sociales de convivencia, horarios y orden, además de proporcionarles conocimientos educativos y formativos. Por último, en los dos centros de reinserción y un piso de autonomía se potencian los aprendizajes sociales adquiridos y se incide más en la formación y preparación para que puedan incorporarse al mercado laboral, así como en las habilidades necesarias para iniciar una vida autónoma normalizada.

Al margen de estos centros donde se desarrolla el itinerario de inserción, existen dos centros de mínimos donde se atiende a los transeúntes que por su deterioro psicosocial, hace muy difícil su recuperación para la sociedad.

Una ocupación media de 52 personas

El consejero visitó el Centro de Atención Integral a Personas sin Hogar de Albacete, acompañado por la alcaldesa, Carmen Oliver, y la delegada provincial de Salud y Bienestar Social, Angelina Martínez.

Lamata, que saludó a la plantilla del centro compuesta por 24 profesionales, resaltó la calidad de las instalaciones y de los servicios de este recurso, que el año pasado atendió unos 4.100 casos de personas en situación de exclusión social y marginalidad, con una ocupación media diaria de 52 personas.

El Gobierno de Castilla-La Mancha que colabora con el Ayuntamiento de Albacete en el funcionamiento de este centro, ha destinado en los últimos siete años 1,6 millones de euros a este fin.

En ese sentido, la alcaldesa de Albacete agradeció el apoyo decidido del Gobierno de Barreda para que este centro cuente con los mejores medios humanos y materiales posibles para atender a las personas más vulnerables de la sociedad y lograr en lo posible su recuperación social.

Según los datos aportados por el centro, en 2008 se ofrecieron 19.154 pernoctaciones, 15.176 desayunos, 15.539 almuerzos y 18.619 cenas, 26.747 servicios de duchas públicas, 5.191 de lavandería, 1.601 de ropero, además de 112 planes de intervención, además de un taller ocupacional y formativo en el que participaron 38 usuarios del centro.